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Cuadro Jesús Eternamente Joven

Mensaje de Jesús Eternamente Joven

Paz a ustedes que escuchan mis palabras, mis muy amados. Deseo que veneren la imagen de mi Madre, ella es Santuario de Esperanza, porque es un Templo de Gracia, al llegar la plenitud de los tiempos me encarné en su Seno Sacrosanto, Ella por ser tan dócil y humilde servidora, por siempre será llamada bienaventurada entre todas la mujeres.

Yo soy la esperanza misma, prometo que he de conceder abundantes bendiciones a todas las almas que la veneren con cariño y propaguen a mi Madre bajo el título de María Santuario de Esperanza, deseo que su Sagrada Imagen sea colocada en un lugar muy especial en los hogares para que las familias se reúnan en torno a la Maternidad de Nuestra Madre y en torno a mi Divina Infancia.

Sus vidas han de experimentar un profundo camino de conversión, pues estos son los tiempos de mi infinita misericordia, vengan con suma confianza y renueven sus vidas a la luz de mi de Evangelio. 

!Si hay esperanza amado rebaño!, mi Madre me presenta en sus maternales brazos ante los pueblos, Yo soy su esperanza y mi respuesta de amor fue dada como entrega total en la Cruz del calvario para la redención de todas las almas. De mi costado traspasado continúa brotando para el mundo entero sangre y agua, que es la manifestación de mi infinita misericordia.

!Oh! cuantas bendiciones he de conceder a todas aquellas almas que veneren y propaguen a mi Madre como Santuario de Esperanza, ella ha venido hasta ustedes con ese hermoso título, llevándolos a mi Sagrado Corazón Eucarístico, para animarlos en el caminar y renovando su fe, comprometiéndolos en la evangelización a tiempo y a destiempo.

Ella como Madre continua protegiendo a mi Iglesia de las asechanzas del maligno, pues de cierto les digo, que por su intercesión alcanzará para ustedes la salud del alma y del cuerpo. 

Los hogares donde se venere su Sagrada Imagen y se viva el Evangelio, siempre contarán con su protección y auxilio. El enemigo huirá de todos aquellos hogares que viven refugiados bajo el manto maternal de la Bienaventurada siempre Virgen María Santuario de Esperanza. 

Les bendigo en el nombre del Padre, del Hijo que soy y del Espíritu Santo. Amén.