Fraternidad Misionera de Jesús y María, den gracias a Dios por el don recibido, permanezcan en continua fidelidad al Señor y a su Iglesia, enarbolen con valentía la bandera de la esperanza, profundicen en el llamado recibido.

Ustedes han sido constituidos en un ejército firme de amor y misericordia, ustedes portan el estandarte de Jesús Eternamente Joven y de María Santuario de Esperanza, ejército de oración y de reparación, ejército del Triunfo del Inmaculado Corazón de María y del Reinado Eucarístico del Sagrado Corazón de Jesús Eternamente Joven.

Oren siempre con mucha humildad y con mucha esperanza, lleven con profunda alegría la misión recibida y no permitan que el demonio les desanime.

Sean Evangelio vivo, tal como se los ha enseñado la Santa Reina del Cielo y de la tierra, María Santísima. Oren con profunda piedad y recogimiento la Colmena de Santidad una vez por semana, y con gran amor correspondan al carisma recibido, atendiendo cabalmente a las orientaciones dadas para la conformación de la Fraternidad. 

Recuerden que la oración de la Colmena de Santidad debe ser realizada como se les ha indicado, esta no debe ser realizada esporádicamente. 

El Servicio al Señor debe ser movido por el amor y así desde el amor deben realizar todo con disciplina y perseverancia.

Los que correspondan al llamado recibido, observen con la asistencia del Espíritu Santo, la fidelidad del carisma, sin desvirtuarlo con interpretaciones personales. Es preciso que los mensajes dados por Nuestro Señor y la Santísima Virgen sean leídos, meditados y llevados a la práctica en la cotidianidad, en todas estas enseñanzas podrán mantener las bases fundacionales de este movimiento de gracia. 

Es preciso que conozcan la fe de la Iglesia, sepan que todos son parte del Cuerpo Místico de Cristo, conozcan la fe recibida, conozcan la doctrina de la Iglesia, para que no sean confundidos y puedan dar testimonio. 

Levanten en sus hogares, un lugar especial dedicado a Nuestro Señor Jesús Eternamente Joven y a María Santuario de Esperanza, con todos los sacramentales y devociones recibidas en la Fraternidad Misionera, este lugar será muy agraciado para todas aquellas almas que honren con mucha fe este inmenso don. 

Que la Santa Cruz de las Gracias presida estos lugares especiales. 

Propaguen las Sagradas Imágenes y devoción de Jesús Eternamente Joven y de María Santuario de Esperanza, así como también todas las devociones confiadas a la Fraternidad Misionera de Jesús y María. 

Den a conocer la Santa Cruz de las Gracias, la Bandera de la Esperanza, para que en muchos lugares sean entronizadas solemnemente, empezando por los hogares, los templos y los institutos religiosos. Recuerden que estos gloriosos sacramentales son signos eficaces de la gracia del Triunfo del Inmaculado Corazón de María y del Reinado del Sagrado Corazón Eucarístico de Jesús Eternamente Joven. 

Respondan con generosidad al llamado recibido y sean faroles encendidos desde distintos lugares del mundo, trabajando incansablemente para mayor gloria de Dios, y de la Santa Iglesia Católica. 

Cuenten siempre con mi patrocinio y asistencia, que Dios les conceda en todo momento su gracia y bendición en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.