Mensaje de María Santuario de Esperanza
- 21 de Abril de 2012
Queridos y muy amados hijos, los amo.
En estos últimos tiempos hijitos, hago un llamado maternal a todos ustedes a la verdadera y sincera conversión de corazón, renuncien al pecado y busquen a Dios de todo corazón. Hijitos, el mundo cada vez más se deja seducir por los engaños de satanás, muchos hijos viven sumergidos en el materialismo y en el apego a las cosas pasajeras; el relativismo está destruyendo a la sociedad, las familias viven divididas y la cultura de la muerte está cada vez más arraigada en el corazón de los hombres. Por eso vengo a ustedes, atiendan a mi llamado maternal, sean promotores de la cultura de la vida y depositen su confianza en Jesús que es su esperanza.
Vuelvan a Dios hijitos, recurran a Jesús con suma confianza pues su infinita misericordia es concedida a todos aquellos que recurren con confianza y con un corazón arrepentido.
Hijitos busquen las cosas del Cielo, busquen primero el Reino de Dios y su Justicia, y Él les dará las demás cosas. No anden ocupados en cosas temporales que dañan al alma, más bien, busquen las cosas buenas, hagan el bien, procuren la unidad en las familias, sean promotores de paz, sean Evangelios vivos.
Encarnen en sus vidas la Palabra de Dios, prediquen la Buena Nueva de Salvación, fortalezcan los pies cansados y las rodillas vacilantes, robustezcan el espíritu por medio de la vida sacramental, estén despiertos hijos míos.
Su oración debe ser constante y vigilante, oren los unos por los otros pues el mundo vive momentos difíciles, oren por la conversión de los pecadores, recen el Santo Rosario, pues el Santo Rosario vence al enemigo y a todos sus planes del mal. Recen el Santo Rosario y la paz del mundo se dará.
Les concedo mi bendición maternal, amorosa y protectora en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.